martes, 16 de julio de 2019

“Rostros que delatan”




En el cuerpo reside la homofobia y la transfobia de maneras extrañas y silenciosas, a  ellas debemos temer más que a las que se expresan, estás silenciosas formas callan pero no dejan de actuar, evadir e ignorar los cuerpos de quienes amamos diferente, de quienes transitan el género, de quienes mandamos al carajo los roles, los sexos, las dicotomías y nos gozamos de la extravagancia. La homofobia y la transfobia residen de maneras extrañas y un rostro delata su existencia, no hay cuerpos adoloridos ni almas torturadas, desaparecernos se han propuesto.

En el cuerpo reside la homofobia y la transfobia de maneras extrañas y silenciosas, subes las escaleras para tomar una foto y entre la muchedumbre silenciada que observa la multitud vestida de colores, observas, aquel rostro de quien apunta con la mirada a las personas como si estuviera observando desperdicios, y le miras compasivo porque carece de un espejo para ver cómo ha encarnado en su rostro su “más que desprecio”.

En el cuerpo reside la homofobia y la transfobia de maneras extrañas y silenciosas, subes al escenario de un evento, la gente te mira como al intruso, rostros y rostros, aprietan sus bocas, sus ojos se tornan menos abiertos, mas semejantes a un ovalo, sus cuerpos adquieren un rigor, están más tiesos, más tensos… en el fondo sabes cuánto desean que no estés allí… lo siento no nos vamos a ir, nuestros cuerpos gritan… y ellos secretamente cavilan como desaparecernos.

En el cuerpo reside la homofobia y la transfobia de maneras extrañas y silenciosas, pero a veces se expresan, solo dicen que no somos adecuados al que anda por allí, se suben a los buses a veces predicando, a veces buscando la oportunidad para sentirse mejor que otros; a veces solo quieren una silla y cuando se la das a tu pareja intentan insultarte diciendo: “¡¿será que se lo va dar al novio?!... despreciable hecho, este rostro enfadado piensa que poner en cuestionamiento la masculinidad de los hombres es una arma efectiva, y replica como aún se cree que amar es un delito para las personas homosexuales y trans, es homofobia, es transfobia, pero está estrellada, se choca con la realidad de quien ya no debe temer quien es, porque tan solo respondes: Si ¿Algún problema?... Y el rostro de aquel se llena de vergüenza.

En el cuerpo reside la homofobia y la transfobia de maneras extrañas y silenciosas, te observan y vigilan así te conozcan por 4 años, siempre será un delito que te muestres accesible, no importa si es para responder la pregunta de un estudiante; con gusto sus cuerpos te siguen para ver qué haces, esperan, aguardan, después de todo no pueden verte como un buen docente, solo te ven como el “pedófilo inventado”, ese del que con gusto muchos nos acusan a pesar de ser generalmente heterosexuales los pedófilos, pero no importa, si les preguntaras no te dirían que lo creen, pero en sus cuerpo ya se instala  esas creencias, por eso mejor prefieres que las cámaras te vean y cuando sales caminando distraídamente, ellos voltean sus rostros; tranquilos, allá cubiertos nadie los vio, nadie evidenció su homofobia, su transfobia…

Rostros tensos, rostros que no ven personas, rostros vigilantes, rostros que reclaman masculinidades heteronormativas, rostros homofóbicos y transfobicos… de mi parte yo les entrego a Dios, he decido que me resbalan, que de sus prisiones mentales no los voy a sacar yo, que esas mentalidades que están más pegadas que la piel en sus cuerpos, que la vida misma porque sobrevivirán a esos rostros, y por desgracia habitarán otras caras, como esos demonios que tanto temen muchos cristianos… aun así le pido a Dios que les libere, que no permita que esos rostros censuren el amor, el libre desarrollo de la personalidad, que nos arrebaten la dignidad, que se transformen o se unan a las voces del odio y a los dogmas e ideologías con que nos persiguen, yo, les deseo lo mejor pero debo decirles que sus rostros los delatan… Bendiciones a ustedes, yo no quiero que en mi siembren odio, yo quiero sembrar paz.

Dios concédeme la paz frente a estos rostros, amarte y amarme, y besar el rostro del amado, de la amada, de quien ame pues Tú  me lo has dado. Gloria a Dios.



Josue3475

FALSA MORAL CON IMAGENES DE LATTER DAYS